Científicos de 23 países brindan aportes al Marco Mundial de la Diversidad Biológica posterior a 2020
Sábado, 23 Jul 2022
Hongos en la Reserva Natural de la Montaña Ailao, provincia de Yunnan, China. Foto: ICRAF/Austin G. Smith
Un grupo de
cincuenta científicos convocados por bioDISCOVERY,
una red de investigación global de Future Earth,
y el Group on Earth Observations Biodiversity Observation
Network (GEO BON), publicaron una serie de recomendaciones para
brindar apoyo a las negociaciones del Marco Mundial de la Diversidad Biológica
posterior a 2020, en la edición de junio de este año de la revista One Earth.
Los impactos
humanos en la biosfera de la Tierra están impulsando la crisis mundial de la
biodiversidad, escriben los autores. Las tres cuartas partes de los ecosistemas
terrestres se han alterado significativamente, una cuarta parte de las especies
de plantas y animales evaluadas están en peligro de extinción y la diversidad
genética está disminuyendo en especies silvestres y domesticadas.
Esta es una crisis
de la biodiversidad que está provocando una enorme disminución en las
contribuciones de la naturaleza a las personas.
Las partes del
Convenio sobre la Diversidad Biológica están negociando un conjunto de acciones
destinadas a detener la pérdida de biodiversidad y poner al planeta en el
camino de la recuperación para 2050. Esta ambición se conoce como “reducir la
curva”.
El grupo de
científicos, incluidos los investigadores del Centro para la Investigación
Forestal Internacional y el Centro Internacional de Investigación en
Agroforestería (CIFOR-ICRAF) Manuel Guariguata y Jianchu Xu, proporcionó
evidencia al marco de que las acciones propuestas pueden, de hecho, reducir la
curva de pérdida de la biodiversidad, pero solo si estas acciones se
implementan con urgencia y de manera integrada.
“Es esencial tratar
los objetivos, los hitos y las metas del marco como un todo indivisible, en
lugar de centrarse en sus elementos individuales”, señaló Guariguata.
Las acciones
propuestas se establecen en el primer borrador del marco mundial para la
biodiversidad post-2020, cuya versión final está prevista que se adopte en
la Decimoquinta Conferencia de las
Partes del Convenio sobre la Diversidad Biológica en Kunming,
China y Montreal, Canadá, en dos fases. El borrador del marco contiene 21 metas
orientadas a la acción para 2030 en tres grupos: 1) reducir las amenazas
actuando sobre los impulsores directos de la pérdida de biodiversidad; 2)
satisfacer las necesidades de las personas mediante la utilización sostenible y
la participación en los beneficios; y 3) herramientas y medios de
implementación, que en su mayoría actúan sobre impulsores indirectos de
pérdida.
Para arrojar luz
sobre cómo las acciones en las 21 metas pueden contribuir a lograr el objetivo
de mejorar la integridad de la biodiversidad y los ecosistemas, los
investigadores recomiendan:
Un enfoque
sistémico
Un enfoque
sistémico en todos los objetivos es esencial, apunta el grupo. Su síntesis de
investigación examinó las metas del 1 al 10, que actúan sobre los impulsores
directos de la pérdida de biodiversidad. Su análisis encontró que ningún
objetivo individual que actúa sobre los impulsores directos hace una
contribución de más del 10-15 %. No existe un vínculo uno a uno desde cualquier
objetivo de acción a un hito o meta determinado.
En otras palabras,
para ser efectivo, el marco debe implementarse de manera integrada y los
objetivos, hitos y metas deben verse como un todo indivisible.
Cambio
transformador para reducir la curva
El grupo analizó
tres escenarios para 2030 y 2050 que están directamente relacionados con el
marco. Se prevé que el logro de los ambiciosos objetivos propuestos de expandir
las áreas protegidas, crear planes de manejo de especies y restaurar
ecosistemas mientras se detiene la conversión de los ecosistemas naturales,
desacelere la pérdida futura de biodiversidad, pero no la detenga.
Reducir aún más la
pérdida se ve obstaculizado en parte por el progreso insuficiente en la
restauración de la biodiversidad, las funciones de los ecosistemas y la
conectividad en las tierras agrícolas, que ocupan aproximadamente el 40 % de la
superficie terrestre del planeta.
Los científicos y
sus colegas señalan que es posible que los objetivos solo se alcancen
parcialmente porque las tendencias actuales indican que las áreas protegidas no
cuentan con los recursos suficientes, el establecimiento de áreas protegidas
ecológicamente importantes es lento y la restauración utilizando las mejores
prácticas ecológicas no se está produciendo tan rápido y tan ampliamente como
se necesita.
Acciones urgentes y
sostenidas
Hay retrasos de
tiempo significativos entre los impactos de los impulsores y la magnitud del
cambio en la biodiversidad. Los retrasos ocurren con frecuencia durante
décadas, por lo que cuanto antes se mitiguen los factores determinantes, menor
será el retraso.
Colaboración
internacional y enfoque multiescala
Es necesario un
diálogo mejorado entre las agendas nacionales y las prioridades globales,
respaldado por mecanismos de responsabilidad y transparencia, incluida una
revisión más regular y una mayor colaboración en la implementación.
Un marco de
seguimiento y mecanismos de revisión para lograr resultados
Los indicadores para evaluar las tendencias en los impulsores de la pérdida de biodiversidad no están incluidos actualmente en el marco, pero son esenciales para demostrar que las acciones dan como resultado la recuperación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario